martes, 31 de agosto de 2010

Otro amanecer más.


Me quedo contemplando la ventana,
donde veo como sale el sol,
otro días más ha pasado,
otras cuantas horas han pasado,
veo como siguen los minutos y segundos,
el tiempo me pisa, me aplasta, se va acercando el momento.






Yo quiero sitios con paz, donde pueda andar,
sin miedo a clavarme un cristal en el pie,
que mis ojos no sufran al ver el sol, pero eso solo será cuando olvide que me llamo Alicia
o viva en las afueras.

Creo que algo me está hablando, que me avisa,
que me dice que huya,
que corra durante septiembre, octubre y noviembre,
quizás también diciembre,
y que espere la llegada del dulce enero, y pueda respirar,
un lugar...donde se acaben los dolores de cabeza,
y pueda saltar y gritar sin parar.




Que hasta tienes contados los escalones de su casa, y los pasos que te quedan para llegar a él, incluso el día de cuando le dijiste tu nombre.

2 comentarios:

  1. Todos queremos huir, pero a veces, lo que nos ata a seguir aquí, es lo que hace que no lo hagamos por que no siempre pero si muchas veces, vale más que cualquier motivo que haga que nos acobardemos.

    Valentía amiwita

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  2. Habra paz cuando la costrullas con tus propios cimientos, sabes que aunk te vayas al otro lado del mundo o escapes, eso perdudara, hasta que no costrullas barreras o escojas la respiracion que tan bien te sienta.
    Te llamas Alicia, pero eso lo puedes cambiar no?

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