viernes, 25 de marzo de 2011

martes, 15 de marzo de 2011

A veces lo más monstruoso puede ser lo más precioso.

- Hace mucho tiempo, un inventor vivía en esa mansión. Inventaba muchísimas cosas.
Un día, creó a un hombre. Y le dio entrañas, un corazón, un cerebro. Todo. Bueno, casi todo.
Verás, el inventor era ya muy viejo. Murió antes de poder acabar al ser que había creado. Así que el hombre se quedó solo. Inacabado, y completamente solo.
- ¿Y no tenia nombre?
- ¡Claro que tenía nombre! Se llamaba Edward.
- Antes de que él viniera, no nevaba nunca. En cambio después, sí nevó. Si él no siguiera vivo, ahora no estaría nevando... A veces aún bailo bajo la nieve.




Kim: Pero si lo sabías, ¿por qué lo hiciste?
Edward: Porque tú me lo pediste.

jueves, 3 de marzo de 2011

Estoy enferma, ¿y qué?


No os interesa a nadie.



Día 5: Podría llamarlo estúpido, pero le daría protagonismo.
Imagina los recuerdos perfectos.
Regados alrededor en el suelo.
Tratando de alcanzar el teléfono, porque no puedo luchar contra esto mas.
Y me pregunto, si alguna vez he pasado por tu mente
A mi me sucede todo el tiempo.
Son las una y cuarto, estoy sola y te necesito ahora.
Dije que no vendría, pero he perdido todo el control y te necesito ahora.
Y no se como estar sin ti, solo te necesito ahora.
Otro trago de Vodka, no puedo dejar de ver la puerta
Esperando que entrarías arrasando, tal como lo hiciste la vez anterior.



Si, prefiero lastimarme, que no sentir nada en absoluto :)